justa lucha por los DDHH

María Ester Gatti inauguró biblioteca y festejó el cumpleaños de Mariana: Los DDHH en el Uruguay, es una materia que se está dando aún y tiene mucho exámen por rendir el mismo.

terminal contenedores, uruguay

Un tema nacional: la 2ª  terminal de contenedores

 

La subasta de una segunda terminal de contenedores en el puerto de Montevideo pasó por las mismas instancias de la primera. Ambas no tuvieron ofertantes en su primera etapa por lo que habrá una segunda oportunidad.

La evaluación de los partidos políticos ronda entre acusar al gobierno de fracaso y buscar sacar rédito partidario o, en ser coherentes y recordar que la segunda terminal de contenedores es una Ley que contó con el voto de todos los partidos en el Parlamento.

Ahí está lo esencial, se trata de una necesidad que el país todo entendió que era necesario y coherente para continuar con la estrategia de convertir al país en «el» polo logístico regional.

Existe una gran diferencia entre definir como objetivo convertirse en el polo logístico regional y convertirse en un polo logístico más. Cambia mucho, hace la diferencia, y en eso estuvieron de acuerdo todos los partidos políticos del Uruguay.

Es más, los operadores privados también coinciden en este objetivo a excepción de quienes operan la primera terminal de contenedores que parece defender a ultranza un monopolio privado en esa área. Para decirlo de otra manera, aspiran a concretar lo que en su propio país es inimaginable: que una sola empresa detente el poder de gestionar una terminal de contenedores.

Si bien no nos interesa entrar en la discusión sobre la vigencia y oportunidad de una segunda terminal de contenedores porque nos introduciría en cuestionar la vigencia de una Ley de reciente aprobación y que cuenta con el apoyo de todos los partidos políticos, es conveniente asimismo, no meter la cabeza en el agujero y desconocer la realidad.

Pero, ¿cuál es la realidad ? ¿que no se necesita una segunda terminal?, ¿que la subasta no interesa? ¿o que habría que ajustar algunas exigencias para adecuarse a la realidad de un mercado que ha sido golpeado por la crisis mundial?

Nos inclinamos por la tercera opción, al igual que varios operadores marítimos que son conocedores profundos de la realidad mundial en este aspecto.

Es más, quienes hoy gozan de la concesión de la primera terminal de contenedores, con seguridad no deben olvidar que la obtuvieron luego de una segunda instancia de subasta, ya que la primera, al igual que hace unos días atrás, resultó fallida.

Prácticamente nadie, con excepciones, entiende que ha sido un fracaso esta primera intentona, sino que se han inclinado por sostener que se deben adecuar sus términos a la realidad actual en el mundo.

¿Por qué? Por una sencilla razón, invitamos a los lectores que nos recuerden cuándo un jerarca con tal grado de investidura se ha hecho responsable de un «fracaso»? ¿Tenemos antecedentes en el país? ¿Aquellos que vendieron el Banco Comercial otrora, asumieron este negocio como un fracaso? ¿quienes se vieron venir la aftosa en la región y no actuaron en consonancia, alguna vez aceptaron su error? ¿los gobernantes y principales directores del Banco Central que fueron activos espectadores de la debacle financiera argentina y sus consecuencias sobre el sistema bancario y financiero uruguayo, alguna vez reconocieron su error? Todo lo contrario, todos ellos son considerados prohombres de la patria, y ninguno de ellos fue cuestionado dentro de su partido, es más, el principal actor y responsable de la debacle financiera del país fue condecorado por el FMI nombrándolo asesor.

Es más, pedimos que nos recuerden la actitud de algún gobernante que haya asumido personalmente la responsabilidad por impulsar un proyecto de desarrollo que en una primera instancia no prosperó.

En un país donde algunos militares retirados y otros pocos en actividad ni siquiera admiten que se haya torturado a quienes pensaban diferente a ellos, que sostienen desconocer que existan desaparecidos, venta de niños secuestrados, centros clandestinos de tortura, y muertes cobardes de detenidos políticos, y que, además, cuentan con el respaldo para ello de algunos líderes políticos (que afortunadamente hoy están en vías de extinción), la actitud de Puntigliano no sólo habla de sus principios éticos, sino de su compromiso con el progreso del país.

No es lo habitual, no estamos acostumbrados a esta postura tan honesta y valiente, pero, más allá de que no la compartimos porque fue el espectro político el que decidió subastar una segunda terminal, importa sí señalar que Puntigliano con su actitud hace honor a los principios y a la honestidad con que la fuerza política a la que pertenece, gobierna al país.

Es claro que la ciudadanía también comparte esta forma de leer la realidad.